Después de 25 años sin exponer en El Almacén, Tayó vuelve a este espacio emblemático con un proyecto expositivo cuya obra nos invita a mirarla y entenderla como una entidad cultural antropológica y universal, donde lo fronterizo y sus deslizamientos generan miradas que van más allá del tiempo y de los espacios que nos rodean.
La experiencia artística y vital se vuelve un camino en el que los vestigios, los sentimientos, los personajes, la naturaleza y el paisaje se hacen presentes en los múltiples despliegues del autor, de la mano lo lúdico, de las transferencias y de las diferentes líneas narrativas de su discurso artístico.